#EnGlobal: ✭✭✭✭✭✭✭✭✩✩
Salido a mediados de diciembre del año pasado en algunos países, y a mediados de enero de 2019 en otros, quizá podría considerarse más lanzamiento de 2019 que de 2018. Lo que sí es seguro es que el giro musical que ha dado el guitarrista indonesio Dewa Budjana, al menos para mí, ha sido tan sorpresivo como positivo. Los 48 intensos minutos de Mahandini (2018) son un claro cambio de foco hacia tintes más rockprogresivos, si se me permite la palabra, más afines a esos ecos progresivos de Steven Wilson que al jazz de Pat Metheny, aunque sin dejar ese sello jazz-fusion tan personal. Ninguna de las siete piezas podría considerarse jazz, pero aún así hay un aura jazzística de lo más deliciosa impregnando todo el CD.
A lo largo de los casi 30 años de carrera musical, Budjana ha sabido, sobretodo en los últimos años, rodearse de grandes colaboradores como Tony Levin, Gary Husband, los miembros del Pat Petheny Unity Group Ben Williams y Antonio Sanchez, o incluso la Czech Symphony Orchestra en su último Zentuary (2016), pero quizá tanta productividad (4 álbumes en 4 años, uno de ellos doble), tantas colaboraciones distintas y el formato de grabación del todo-en-un-día, muy frecuente en el jazz por otro lado, llegaba a resultar un global demasiado irregular. Por eso este cambio de paradigma sonoro es tan bienvenido. Y es que en un mismo CD encontramos auténticas joyas del jazz progresivo con tintes del folk del sud-este asiático (prueba de ello son Solas PM de Zentuary, o Gangga de Dawai in Paradise (2015)), como también piezas sin alma y que aun con improvisaciones de tan magnos invitados no saben evolucionar adecuadamente, como Uncle Jack.
Además, aunque ha seguido manteniendo el formato de grabación seguida en un solo día de estudio, Dewa Budjana ha contado con el envidiable grupo cerrado que puede verse en la imagen de arriba, y que salvo algún caso muy particular (como las múltiples líneas de fondo de Budjana o el konnakol que hablaré luego), se han evitado los overdubs. Dicho grupo está encabezado por los virtuosos Jordan Rudess (Dream Theater) y Marco Minnemann (The Aristocrats, The Sea Within, Roine Stolt), que aparte de ser primeras espadas dentro del rock y el metal progresivo tienen cierta afinidad con el jazz y una química común brutal a raíz de su grupo Levin-Rudess-Minnemann. Pero curiosamente, el otro miembro del trío y antiguo colaborador de Budjana Tony Levin, deja paso a la nueva estrella emergente (y femenina) en el mundo del bajo: Mohini Dey, quien a sus 22 años ya puede decir (entre otras cosas) que es la actual bajista de Steve Vai. El resultado es una amalgama de sonidos muy cohesionada y muy orgánica, donde se nota la química entre ellos y cómo los distintos virtuosismos de la banda se gustan entre sí, sobretodo en la fructífera relación musical entre Minnemann y Dey, quienes desarrolan una versión progresiva de un antiguo arte de la India basado en la percusión vocal llamado Konnakol, donde cada sílaba que Mohini Dey pronuncia equivale a un sonido distinto de percusión. Es sólo un minuto, en el 4:40 de Queen Kanya, pero el resultado final (con Dey en overdub al bajo y a la voz, que como se puede ver en el siguiente video es casi imposible ejecutar a la vez) es de una intensidad increíble:
En la citada Queen Kanya estos tres monstruos virtuosos ya hacen de las suyas mientras el genial punteo de Dewa Budjana avanza sin titubear con ese mood tan suyo entre jazz y new age, pero es especialmente interesante ver los duelos que mantienen Rudess y Dey con Minnemann doblándoles sin parar en la pieza que da nombre al disco, Mahandini (con solo de batería al final), así como en la siguiente, Hyang Giri, que además incorpora ese canto mágico propio de la invitada Soimah Pancawati y que eleva mucho la parte central del álbum. Ilw, curiosamente el corte más rockero del disco, tiene una perla super jazzística en forma de duelo interpretativo a cuatro manos entre el propio Budjana y Mike Stern, legendario guitarrista de jazz que ha trabajado con Miles Davis o Stan Getz. Y John Frusciante, conocido por ser miembro de los Red Hot Chili Peppers, compone y aparece cantando en las únicas dos canciones no instrumentales del disco, Crowded y Zone, y aunque Budjana ha hecho los arreglos, son sin duda las piezas menos interesantes del álbum, con Crowded especialmente insulsa. Aún así, si se obvian las canciones de Frusciante el global son más de 30 minutos instrumentales de gran calidad, que por sí solos ya valen la pena con su mezcla de jazz y rock progresivo exquisitamente planteada.
MAHANDINI
Rock progresivo / Jazz
(Dewa Budjana, Indonesia/USA, 2019)Composición
Producción
Interpretación
Interpelación
Duración
Ordenación
Packaging
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CANCIÓN TOP✭✭✭✭✭✭✭✭✩✩
Mahandini