Abril de 2018 promete ser un mes con grandes conciertos de metal, y muy dispares entre sí. En A finales de mes tendremos un recital de death metal progresivo de gran nivel técnico, pero el pasado 5 de abril se dio, en la Sala Monasterio, el concierto de uno de los discos del año anterior, almenos para un servidor: los italianos Secret Sphere, con una de las mejores voces del panorama metalero mundial al frente (Michele Luppi), presentaban su Nature of Time, acompañados de los también italianos Sailing to Nowhere de teloneros.
Aunque concierto empezó algo más tarde de lo previsto, eso no afectó al desarrollo ni al setlist de éste para ninguna de las dos bandas, y sí que nos permitió a los pocos fans que nos habíamos acercado a la sala poder charlar amigablemente con los componentes de la banda, como el alma mater, compositor y guitarrista Aldo Lonobile o el increíble frontman (y miembro de Whitesnake) Michele Luppi. Pero primero salieron al escenario los teloneros, Sailing to Nowhere, que ejecutaron un digno pero algo típico power metal de no ser por tener 3 cantantes en sus filas: Marco Palazzi, Clara Trucchi y Helena Pieraccini. Supieron moverse muy bien pese al poco sitio que tenían, y conectaron bastante con el público, pero al lanzar su segundo álbum con un tono más melódico que su antecesor, su setlist fue algo descafeinado al inicio con Scream of the World y Ghost City, dejando las canciones más brutales (You Won’t Dare y Sailing to Nowhere de su primer cd) para el final. Aún así, Apocalypse y Suffering in Silence de su nuevo Lost in Time al ecuador sonaron de maravilla.
Y llegaba el momento: los primeros compases de la contemplativa intro instrumental Intermission retumbaban por los altavoces mientras los componentes de Secret Sphere ocupaban sus puestos para empezar con The Calling, ese magnífico e inusual inicio progresivo para un álbum que se antojaba más powermetalero. Todos y cada uno de los temazos de su Nature of Time fueron interpretados en su totalidad y en el mismo orden que en el cd, pues el carácter temático del álbum le confiere una entidad propia total y además, supone la entrada de la banda de lleno al progresivo, con temas rápidos como Courage o The Awakening y baladas como Love y Honesty, así como también joyas del progresivo y de la técnica como la ya citada The Calling, mi favorita Faith, Reliance, The New Beginning o la instrumental Commitment.
Pero no acabó aquí su concierto, no. Después de los 55 minutos íntegros de Nature of Time llegó el momento de 4 clásicos de la banda como bises, como Union y The Fall, y un grand finale apoteósico con Healing y su eterna y ya ultra progresiva Legend.
A destacar la habilidad de Aldo Lonobile a las guitarras y Gabriele Ciacia a los teclados, ambos a un gran nivel durante todo el recital, así como una perfecta sección rítmica con Marco Lazzarini a la batería y Andy Buratto al bajo. Pero sobretodo, esa voz. Michele Luppi es directamente sobrenatural en el escenario. Modula la voz a la perfección, canta incluso mejor en directo que en disco luciéndose en unos agudos casi ultrasónicos sin apenas esfuerzo y aún tiene tiempo para bromear con la banda, poner caras divertidas mientras le hacen fotos, dedicarle y cantarle una de las canciones a una niña pequeña que iba en brazos de su padre en primera fila, y grabar a su propia banda durante el concierto con una cámara. Genio y figura, simpatía y sobretodo humildad tanto dentro como fuera del escenario.
Al final del concierto pude volver a hablar con ellos, fotografiarme con la banda al completo, y que me firmaran su doble cd del directo de Live In Tokyo que lanzaron en 2016. Una pena que la sala no estuviera a rebosar aun no siendo muy grande: son uno de los grupos que mejor power metal hacen y con más personalidad, y con excelentes músicos en sus filas, y almenos aquí, no han despegado siendo este brutal Nature of Time su octavo LP. Espero logren pronto las legiones de fans que sin duda se merecen.